IDIOCRACIA: posibles consecuencias de la selección natural
ANTECEDENTES HISTÓRICOS: GALTON
Entre 1860 y 1870 Galton se basó en la teoría de la evolución de su primo Charles Darwin (El origen de las especies) para desarrollar lo que serían como reconocidas las primeras ideas eugenésicas. Sus estudios surgieron a partir de cuando observó una interpretación de la obra de Darwin a través de la cual los mecanismos de la selección natural eran potencialmente frustrados por la civilización humana. Existían cada vez más políticas sociales que protegían a los más débiles y desfavorecidos, por lo que en su libro El genio hereditario (1869) argumentó que la inteligencia y la personalidad eran rasgos hereditarios en el ser humano (estudios hoy día sí han confirmado algunas de sus tesis, pero en su época no disponía de la suficiente base científica como para poder afirmar tales ideas). Además, concluyó que la selección artificial era la solución idónea para poner fin al incremento de enfermedades disgenéticas hereditarias y educar a la gente explicándoles la importancia de la buena reproducción.
PROBLEMA:
Según Galton la sociedad ya fomentaba las enfermedades disgenéticas, afirmando que los menos inteligentes se reproducían más que los más inteligentes.
Según Galton la sociedad ya fomentaba las enfermedades disgenéticas, afirmando que los menos inteligentes se reproducían más que los más inteligentes.
SOLUCIÓN:
La procreación selectiva, esto es, seleccionar individuos que poseen las características adecuadas para la procreación (la conocida como selección artificial).
La procreación selectiva, esto es, seleccionar individuos que poseen las características adecuadas para la procreación (la conocida como selección artificial).
Un ejemplo de esta situación que tanto temía Galton que le pasará en un futuro cercano a la raza humana (el alcanzar el grado de estupidez máxima) se ve reflejado en la película Idiocracia.
SINOPSIS
Un joven mediocre y “comúnmente común” que trabaja para el ejército de los EEUU es seleccionado para un experimento: la idea es congelarle y despertarle dentro de un año con el fin de comprobar si es viable el mantenimiento de los soldados durante un período de tiempo para despertarlos cuando el Estado los necesitase (casos urgentes como guerras, revoluciones, etc). Sin embargo, el experimento falla y el protagonista despierta en un futuro no muy lejano en el que el ser humano ha degenerado en cuanto a facultades intelectuales. Las máquinas han avanzado de tal manera que ya no es siquiera necesaria la inteligencia del hombre para conducirlas ni crear otras nuevas. Así, el ser humano ha dejado de potenciar la inteligencia y se ha centrado en cuestiones más rudimentarias: el sexo, el dinero y una forma de comunicación pobre intercalada por diversos insultos.
He aquí el tráiler (sólo lo encontré en inglés):
LA PROBLEMÁTICA DEL HUMANO ESTÚPIDO
Ahora bien, respecto del tema que estábamos tratando anteriormente (las posibles consecuencias de una selección natural del ser humano sin intervención alguna), remito a este vídeo en donde se ven las causas de por qué esa evolución a la estupidez.
Esto es algo que ya Darwin, Galton y Malthus (entre otros) habían previsto que iba a suceder. La pregunta es: ¿acaso podría el ser humano llegar a este extremo? Y si es así, ¿qué deberíamos hacer para evitarlo?
